lunes, 3 de julio de 2017

SÓLO ES TIEMPO


Dos de mis obras acaban de ver la luz: “La segunda mirada” (una breve novela) y “La voz confabulada” (un volumen de poesía). De la misma manera que un reloj adquiere su significado al ser observado en la muñeca, el sentido que puedan tener estos dos libros comienza en la lectura de quien los abra. La historia eligió ser narrada, y la intuición decidió convertirse en verso. Lo demás sólo es tiempo.





Ricardo García Nieto

martes, 28 de febrero de 2017

LOS RÍOS QUE REGRESAN

 
Los hombres que se redimen con una postrera acción son como los libros que se salvan por una frase. Cualquiera puede revolver en la oscuridad y rescatar la inocencia perdida, que siempre es heroica. Cualquiera puede tumbar dragones.
En este autorretrato, que Joshua Reynolds pintó con veintipocos años, permanece la ingenuidad y su atrevimiento, un refinado atisbo de la verdad cuya búsqueda llena de sentido nuestras vidas.
Hay un Juicio Final en el recuerdo de nuestra historia personal. Y un reconocimiento de lo que vinimos a hacer a este mundo. Es el momento de la melancolía, de la mirada que se pierde para alumbrar nuestro interior. Volvemos, sin saberlo, a la audaz pureza de nuestra infancia. Y nos convertimos en hijos pródigos, en ríos que regresan a su fuente inagotable.

Ricardo García Nieto.


miércoles, 22 de febrero de 2017

EL PROCESO

 

Todo templo se construye en el corazón. 
Todo temor lo destruye.
 Las motas en la luz buscan cimientos.



Ricardo García Nieto.

sábado, 18 de febrero de 2017

AQUÍ Y AHORA

La eternidad está aquí y ahora. Fluimos en lo que hacemos. No pensamos por qué, ni si nos gusta o no, ni si nos juzgan o no. Sencillamente, estamos. La luz no nos viene dada de afuera; es el idioma con que nos hablamos a nosotros mismos, el que nos libera de los ojos rápidos de la vergüenza. Somos libres, elegimos ponernos en manos de algo superior y que, al mismo tiempo, está dentro de nosotros. Podemos llamarlo Dios, Universo, Totalidad… Da igual: nos hace vivir el momento presente como si la muerte no existiese. Cuando Teresa de Ávila decía que “entre pucheros y ollas también anda Dios”, se refería a esto. Lo mismo podrían aseverar aquellos que se entregan cada día. Yo, aunque parezca pretencioso, también me pongo en manos de algo que me supera cuando escribo los breves textos que aquí dejo. Vuelo con el relámpago. Aquí y ahora. No estoy en estas líneas: algo en mí y más allá de mí me utiliza como instrumento.

Ricardo García Nieto.

jueves, 16 de febrero de 2017

ALGO RESONARÁ



Los actos que nos definen son puertas que se cierran en la Tierra para abrir las del Cielo. No somos responsables de nuestros pensamientos, pero sí de las acciones que estos conllevan. De la idea al hecho hay una frontera que es como un estado límbico, una nube en la que se entremezclan el creer y el crear. Cuando se cruza, ya no hay vuelta atrás: la flecha vuela hacia su objetivo, la circunferencia se disuelve en su centro. Siempre me ha subyugado la cuestión del origen de los pensamientos, si es endógeno o exógeno, si han sido impuestos o han surgido de nuestro libre discurrir. Nunca he llegado a una conclusión. O, mejor dicho, la conclusión es que no la hay, que lo que hacemos es pasear por palabras e imágenes, arquetipos que nos poseen a la vez que los poseemos. No hay vuelta atrás. Cierro tras de mí la puerta de estas líneas. Algo resonará.

Ricardo García Nieto.

lunes, 13 de febrero de 2017

SÉ QUE TE SOY



Sé que te soy. Así comienza el primer poema que le escribí a mi esposa. Corría el año de 1982.
Sé que te soy...  Estas cuatro palabras contienen  el universo porque, siendo yo en ella, lo que toco cobra vida; lo que veo, movimiento; lo que imagino, claridad; y lo que siento, amor.
Sé que te soy. Lo demás sólo es tiempo.


Ricardo García Nieto

sábado, 4 de febrero de 2017

EL DESPERTAR Y EL OLVIDO



El alma nos habla en sueños. Despertamos y solemos perder lo que nos ha dicho. A veces, quedan unas imágenes o el incompleto metraje de una historia sin sentido. Lo mismo sucede al nacer, que es como despertar de otro sueño. Lo olvidamos todo y empezamos a forjar nuestra mente partiendo de cero. Tabula rasa. Posiblemente lo más humano que hay en nosotros sea el intuir, conforme pasan los años, el paraíso perdido del que todos procedemos. Si la mente que construimos en el mundo terreno se constituye en la única verdad de nuestras vidas, habrá que esperar a la muerte para conocer el significado que tuvo nuestro esfuerzo por estar vivos.
El alma nunca falta a su cita. El alma nos hace estar donde no estamos.
Han pasado diez minutos desde que empecé a escribir este texto. Pero su idea motriz tiene más de dos mil años. Las líneas palpan con la mano ausente, vislumbran con los ojos ciegos. Y mi soberbia al tratar este tema ha ido demasiado lejos para dejarme en el mismo sitio.

Ricardo García Nieto.