lunes, 2 de diciembre de 2013

MENTIRAS Y AMPUTACIONES

Cuando le cortaron una mano, le dijeron: pronto crecerá de nuevo; vemos brotes verdes. Y la mano no creció.
Cuando le amputaron un pie, le dijeron: hay luz al final del túnel; aún puedes avanzar con el otro pie. Pero no avanzó.
Cuando le quitaron la mano que le quedaba, le dijeron: la situación exige sacrificios, aún te queda casi todo el cuerpo.
Cuando lo dejaron sin piernas, le dijeron; la situación está cambiando, pronto podrás volar.
Los discursos se reproducen. Los miembros amputados no.
Dejar inválido un país debiera contemplarse en el Código Penal con más severidad que un escrache.


Ricardo García Nieto